Es la segunda vez en el año en la que el gobierno interviene en un conflicto laboral.
El Gobierno de Canadá intervino para exigir la reactivación de las operaciones en sus principales puertos, en un esfuerzo por poner fin a los cierres patronales que afectan ambas costas y obligar a empresarios y sindicatos a someterse a un arbitraje vinculante. Esta medida fue anunciada por el ministro de Trabajo, Steven MacKinnon, quien explicó que invocó facultades previstas en el código laboral canadiense, remitiendo la disputa a la Junta de Relaciones Industriales de Canadá para que dicte una orden de reanudación de las actividades.
La intervención gubernamental impacta a puertos clave como el de Montreal, Quebec y Vancouver, este último considerado como la principal puerta de entrada del comercio marítimo canadiense. La decisión fue bien recibida por los grupos empresariales, mientras que los sindicatos manifestaron su rechazo. Este es el segundo caso en 2024 donde el Gobierno federal impone un arbitraje obligatorio para resolver conflictos laborales; el primero fue en el sector ferroviario, cuando se intervino para detener una breve paralización de las operaciones de carga en todo el país.
MacKinnon subrayó la importancia de mantener las operaciones portuarias, señalando que los paros afectan el flujo de bienes valorados en aproximadamente US$934,7 millones diarios. La paralización repercutió en las cadenas de suministro, la economía y el empleo, además de comprometer la reputación de Canadá como socio comercial confiable. Asimismo, el ministro indicó que había recibido reportes de empresas que experimentan dificultades debido a los cierres, incluyendo casos de clientes que buscan alternativas a los puertos canadienses.
Consecuencias
El impacto de los paros en el comercio ha sido notable. Varias empresas internacionales están explorando opciones para reemplazar a Canadá como proveedor de potasa, uno de los principales productos de exportación del país. Además, la industria automotriz enfrenta problemas en la producción debido a la retención de piezas provenientes de Asia. Con la temporada navideña acercándose, el retail temen escasez de productos en las tiendas, mientras que bienes esenciales como la sal, utilizada en procesos de purificación de agua, podrían agotarse en regiones del oeste y norte del país.
Según Everstream Analytics, compañía de análisis de cadenas de suministro, la fila de buques esperando para atracar en la costa oeste de Canadá ha ido en aumento. Algunas líneas navieras ya habrían comenzado a desviar sus naves hacia puertos no afectados por el conflicto laboral, lo que genera embotellamientos y problemas de capacidad en estos destinos alternativos.